Los 38 doctores de la Iglesia

Por Jesús de las Heras Muela

(Periodista y sacerdote. Deán de la catedral de Sigüenza)

 

 

A propósito de la reciente proclamación, por parte del Papa León XIV, del polifacético cardenal británico San John Henry Newman como doctor de la Iglesia

 

 

 

 

 

El pasado 1 de noviembre el Papa León XIV proclamó doctor de la Iglesia al cardenal británico John Henry Newman (1801-1890), converso del anglicanismo, educador, escritor, teólogo, filósofo, poeta, el ya doctor de la conciencia, modelo luminoso de fe y de búsqueda sincera de la verdad. Su memoria litúrgica es el 9 de octubre. Con él, son ya 38 los doctores de la Iglesia, de ellos cuatro mujeres.

 

 

 

¿Qué es un doctor de la Iglesia?

Los doctores de la Iglesia son santos reconocidos por su erudición, santidad y eminente enseñanza de la fe. El título no se refiere a un doctorado médico o en cualquier otra ciencia, sino a una distinción honorífica por su importante contribución teológica y doctrinal a lo largo de la historia de la Iglesia.

Tres son los criterios fundamentales para ser declarado doctor de la Iglesia. El primero, santidad de vida, esto es, el candidato a doctor de la Iglesia debe haber sido canonizado con vida de gran santidad. En segundo lugar, doctrina eminente. La enseñanza del candidato debe tener una gran profundidad y trascender su época, contribuyendo significativamente a la reflexión teológica. Y, en tercer lugar, el reconocimiento oficial. El título es otorgado formalmente por el Papa.

 

Cuatro padres de la Iglesia latina

San Ambrosio de Milán (340-397), obispo de Milán, teólogo, orador, catequeta. San Jerónimo de Estridón (346-420), filólogo trilingüe y autor de la traducción de la Biblia al latín conocida como Vulgata.

San Agustín de Hipona (354-430), gran escritor y teólogo, autor de “La ciudad de Dios”, de “Comentarios a las Sagradas Escrituras” y de su propia biografía, “Confesiones”. Es el doctor de la gracia.

San Gregorio Magno (540-604), monje benedictino, papa, quien evangelizó a los bárbaros, especialmente en Inglaterra; reformó las costumbres y renovó el canto eclesiástico (de ahí viene el nombre de canto gregoriano).

Sus respectivas memorias litúrgicas el 6 de diciembre, el 30 de septiembre, el 28 de agosto y el 3 de septiembre.

 

Cuatro padres de la Iglesia griega

San Atanasio de Alejandría (296-373), quien combatió el arrianismo, fue denominado el campeón de la ortodoxia. El 2 de mayo es su memoria litúrgica.

San Basilio archimandrita (329-379), quien se distinguió por su elocuencia, por su caridad hacia los pobres y su amor al monacato. Es también llamado Basilio el Grande. San Gregorio Nacianceno (328-389), orador elocuentísimo, teólogo profundo y apóstol de la unión de las dos Iglesias (latina y griega). Era de Capadocia, actual Turquía, al igual que el ya citado San Basilio. A ambos se les celebra el 2 de enero.

San Juan Crisóstomo (347-407) o Juan de Antioquía, patriarca de Constantinopla y el mayor de los oradores cristianos. “Pico de oro” significa el sobrenombre Crisóstomo. Su fiesta es el 13 de septiembre.

 

Más doctores del alba de la Iglesia

Como el Atanasio francés, también por su defensa de la verdadera doctrina, ha pasado a la historia el obispo y teólogo francés San Hilario de Poitiers (300-367), con fiesta el 13 de enero.

Egipcio, San Cirilo de Alejandría (376-444), con fiesta el 27 de junio, es llamado doctor de la encarnación y de la maternidad divina de María. Otros dos doctores de Oriente Medio son el diácono San Efrén de Siria (306-373), poeta, denominado El Místico o El arpa del Espíritu; y el obispo San Cirilo de Jerusalén (315-387), con memorias litúrgicas respectivas el 9 de junio y el 18 de marzo.

Palabra de Oro, el italiano San Pedro Crisólogo (400-450), fue obispo y predicador. El 30 de julio es su fiesta, Nacido también el año 400, el Papa San León Magno destacó por su defensa y clarificación de la verdad de Jesucristo. Murió en el año 461. Su celebración es el 10 de noviembre

Del alba de la historia de la Iglesia fue también el segundo doctor incorporado por el Papa FranciscoSan Ireneo de Lyon (140-202), teólogo, obispo, apologeta, el doctor de la unidad. Francisco también designó doctor de la Iglesia al teólogo, poeta, místico y escritor San Gregorio de Narek (945-1010), el doctor armenio. El 28 de junio y el 27 de febrero son sus respectivas fiestas.

 

Alto y medio Medievo

En el Alto Medievo, nos encontramos a dos doctores de la Iglesia. Uno fue el británico San Beda el Venerable (672-735), monje benedictino, historiador; y otro, el monje del desierto, de origen sirio, San Juan Damasceno (675-749).

San Pedro Damián (1007-1072), monje benedictino, cardenal, filósofo y precursor de la reforma gregoriana, italiano. San Anselmo (1033-1109), el doctor magnífico, nació en Aosta (Italia), fue arzobispo de Canterbury (Inglaterra), monje benedictino, teólogo, definió a la teología como “la fe que busca la inteligencia”.

Llamado doctor melifluo, el francés San Bernardo de Claraval (1090-1153) fue monje cisterciense, abad y fundador. Destacado teólogo, predicador y escritor, fue también gran devoto de la Virgen María.

Sus memorias litúrgicas son el 25 de mayo, el 4 de diciembre, el 21 de febrero, el 21 de abril y 20 de agosto, respectivamente.

 

Bajo Medievo         

Dos dominicos, los dos del siglo XII, doctores de la Iglesia fueron San Alberto Magno y Santo Tomás de Aquino. El primero, de origen alemán vivió entre los años 1200 y 1280. Fue obispo, teólogo, científico, es el doctor experto, el doctor universal. Por su parte, el italiano Tomás de Aquino (1225-1274) es el doctor angélico y uno de los más destacados teólogos de toda la historia.

Hay también otros dos franciscanos, del siglo XIII.  El primero en el tiempo fue el luso-italiano San Antonio de Padua ((1195-1231), predicador, teólogo, modelo de caridad, el doctor evangélico. Y el segundo es San Buenaventura de Bagnoreggio (1221-1274), profesor, obispo, cardenal, teólogo, predicador, el doctor seráfico.

Sus memorias litúrgicas respectivas son el 15 de noviembre, el 28 de enero, el 13 de junio y el 15 de julio.

 

Renacimiento y barroco

El jesuita holandés San Pedro Canisio (1521-1597) fue teólogo, predicador, catequeta. Francés, obispo de Ginebra, en el comienzo del calvinismo, fundador, escritor fue San Francisco de Sales (1567-1622), patrono de los periodistas y escritores católicos. Es el doctor de la caridad.

Jesuita, profesor, apologeta, teólogo, obispo, cardenal, denominado martillo de herejes, fue San Roberto Belarmino (1541-1621). Y predicador popular y fraile capuchino fue San Lorenzo de Brindisi (1559-161), el doctor apostólico. Ambos italianos.

Patrono de los moralistas y de los confesores, especialista también en Mariología, denominado el doctor celosísimo, fue San Alfonso María de Ligorio (1696-1787), teólogo, italiano, fundador y obispo.

El 21 de diciembre, el 24 de enero, el 17 de septiembre, el 21 de julio y el 1 de agosto son las fechas respectivas de sus fiestas.

 

Cuatro mujeres

La primera mujer en ser proclamada doctora de la Iglesia fue la española Santa Teresa de Jesús (1515-1582), monja carmelita descalza, reformadora, fundadora, escritora. Es la doctora mística. Después lo fue la italiana Santa Catalina de Siena (1347-1380), terciaria dominica, escritora, mística, impulsora de la paz, la doctora pontificia.

Santa Teresita de Lisieux (1873-1897), monja carmelita descalza francesa, escritora, es la doctora del amor. Y la cuarta mujer doctora de la Iglesia es Santa Hildegarda de Bingen (1098-1179), alemana, monja benedictina, abadesa, mística, profetisa, médica, compositora y escritora, la doctora sibila.

Respectivamente, el 15 de octubre, el 29 de abril, el 1 de octubre y el 17 de septiembre son sus memorias litúrgicas

 

Otros tres doctores españoles más

Junto a la ya citada Santa Teresa de Jesús, son españoles San Isidoro de Sevilla (560-636), obispo de Sevilla en la Iglesia visigótica española, autor de “Las etimologías”; y San Juan de la Cruz (1542-1591), poeta, asceta, místico, fraile carmelita descalzo, el doctor místico.

Y el tercero es San Juan de Ávila (1500-1569), proclamado doctor de la Iglesia en 2012, fue sacerdote, misionero, predicador, escritor, consejero y polifacético.   Su memoria litúrgica es el 10 de mayo; y el 26 de abril es San Isidoro de Sevilla y el 14 de diciembre, San Juan de la Cruz.

 


 

Así se refirió el Papa León XIV al cardenal Newman

Beatificado en Londres por Benedicto XVI en 2010 y canonizado en Roma por Francisco en 2019, San John Henry Newman ha sido proclamado doctor de la Iglesia el 1 de noviembre, solemnidad de Todos los Santos y día del Jubileo Romano del Mundo Educativo. Y, aludiendo a todo ello, así se expresó León XIV

“En esta solemnidad de Todos los Santos, es una gran alegría inscribir a San John Henry Newman entre los doctores de la Iglesia y, al mismo tiempo, con motivo del Jubileo del Mundo Educativo, nombrarlo compatrono, junto con Santo Tomás de Aquino, de todas las personas que forman parte del proceso educativo. La imponente estatura cultural y espiritual de Newman servirá de inspiración a las nuevas generaciones, con un corazón sediento de infinito, dispuestas a realizar, por medio de la investigación y del conocimiento, aquel viaje que, como decían los antiguos, nos hace pasar per aspera ad astra, es decir, a través de las dificultades, hasta las estrellas”.

“Entre el legado perdurable de San John Henry se encuentran, en este sentido, algunas contribuciones muy significativas a la teoría y la práctica de la educación. «Dios —escribía—me ha creado para hacerle algún servicio definido. Me ha encomendado alguna obra que no ha dado a otro. Tengo mi misión. Nunca podré conocerla en esta vida, pero me será revelada en la otra»”.

“San Agustín, a quien san John Henry Newman apreciaba tanto, dijo una vez que somos compañeros de escuela que tienen un solo maestro, cuya escuela y cátedra están en la tierra y en el cielo respectivamente (cf. Sermón 292,1)”.

 

Publicado en Nueva Alcarria el 28 de noviembre de 2025