En la silla de al lado

Rafael C. García Serrano

(Conf. Nuestra Señora de la Antigua - Guadalajara)

 

 

 

 

Estás ahí, en la silla de al lado,

callado, sin sombra, escuchando

lo que hay más allá de mi vida,

buceando en mi alma dormida.

Yo te siento. No te veo, te siento.

Hay un tenue calor que me llega

de esa silla de al lado y me deja

un aliento de luz trasparente,

una ola de dulces mareas

que me invade la vida por dentro

con latidos de paz infinita,

que me habla sin voz y me dicta

el camino que solo no encuentro.

 

Eres Tú que has venido a ayudarme,

quieres ver si despierto y te sigo.