Intenso fin de semana en Pastoral Familiar  

Por Luciano Matilla y Esperanza Torres

Delegación de Familia y Vida

 

Ha terminado el año litúrgico y hemos iniciado un tiempo fuerte: EL ADVIENTO, tras un intenso fin de semana en pastoral familiar con diferentes propuestas de actividad.

Por un lado, el viernes por la tarde, bajo una cortina de lluvia que caía de forma continua sobre la Sierra de Madrid, daban comienzo en Guadarrama las XXXIII Jornadas de Delegados de Pastoral Familiar; Movimientos y Asociaciones Familiares, que organizadas por la Conferencia Episcopal Española, llevaban por título “Los desafíos pastorales de la familia en el contexto de la nueva evangelización”. 

Diferentes padres sinodales, algunos auditores externos y otros nombres conocidos en la materia, fueron desfilando por la tribuna de oradores: Mons.  D. Fernando Sebastián, D. Alfonso Fernández Benito, Dña. María Lacalle Noriega, D. Juan José Perez-Soba y Mons D. Vicenzo Paglia,  nos fueron desgranando las verdades que allí se vivieron, las sensaciones, los comentarios de dentro y de fuera… en definitiva el  Sínodo real y lo que ha supuesto el “Sínodo de los medios de comunicación”. Tres días intensos de formación y oración. De todo lo oído, reflexionado y orado estos días, os dejamos estas reflexiones:

1º) El Papa se dirige a los padres sinodales en la apertura con estas palabras:” Hablad con libertad y escuchad con humildad”.

2º) Mons. D. F. Sebastián, aporta: “Debemos acercarnos con benignidad a los corazones heridos, a los dramas personales, pero sin esconder la verdad”.

3º) Mons. D. Mario Iceta: “La ciencia no es neutral, tiene intencionalidad… la ciencia no es el fin común, lo es la dignidad humana”.

4º) Dra. Dña. Maria Lacalle: “Hemos pasado del hijo como don, al hijo como derecho, y al hijo como carga”… “El matrimonio es una decisión, no un sentimiento”… “Hay que enseñar a amar… aprender a mirarle al otro con los ojos de Dios, verle desde sus ojos para comprenderle mejor”.

Por otro lado, la Marcha de Adviento de Familias del sábado Valdeconcha- Pastrana, que se ha realizado conjuntamente con la Delegación de Juventud.

“Preparad el camino… Velad”

Este era el título de la oración que el pasado sábado celebramos en Pastrana ya caída la tarde y os preguntaréis… ¿qué hacíamos en Pastrana?... pues descansar después de un día de marcha, ¡sí, sí, andando acompañados también por la lluvia!; los jóvenes de nuestra diócesis estaban celebrando la Marcha de Adviento y, gracias a su acogida, nos incorporamos en medio del camino y ¡fuimos acogidos!... llegamos a Pastrana y ¡fuimos acogidos!...

Como os decíamos, terminábamos la jornada con una oración y nos gustaría compartir con vosotros el último texto que escuchábamos:

“Soy el ADVIENTO: por fin, ya tenía ganas de llegar. Soy la esperanza que derriba la indiferencia y el pasotismo que mata el corazón. Soy la esperanza de algo nuevo que está por llegar, la esperanza que hace nuevas todas las cosas. Soy la Palabra que engendra vida… por eso, no tengáis miedo a las sombras, a las tinieblas, a la oscuridad… Mi luz es más fuerte que todo lo demás… Mirad vuestras tinieblas, vuestras sombras, pero lo vamos a hacer juntos desde la luz. Jesús dice: YO SOY LA LUZ DEL MUNDO” (S.M.)

Por tanto… Velad! porque lo cierto es que Él viene, Él siempre viene.

Y…así hemos dado comienzo al Adviento de este año, procurando “estar atentos” a todo lo que nos rodea y poniendo a nuestra familia en actitud de vela y preparación para ofrecer la mejor acogida.